¡Lo sabemos! El vaso, el termo o la botella térmica se volvieron un infaltable en nuestro día a día. Ya sea para el mate, el café, el agua fría o una infusión, nos acompañan a la oficina, al gimnasio o en cada salida. Son prácticos, sustentables y mantienen nuestras bebidas a la temperatura ideal. Pero, ¿te detuviste a pensar si los estás lavando correctamente? 🤔
Si no se higienizan bien, los vasos y botellas térmicas pueden presentar un riesgo potencial de contaminación microbiana y, por lo tanto, convertirse también, en un riesgo de enfermedades transmitidas por los alimentos. 🦠 Y eso puede ser un problema para tu salud, especialmente si los usás a diario, o si tenés ciertas condiciones clínicas.
Es simple: la humedad constante, los restos de bebidas (especialmente si son azucaradas como jugos o café con leche), la saliva que queda al apoyar la boca para beber y la oscuridad del interior de estos recipientes crean condiciones para que las esporas de moho que flotan en el aire y las bacterias que transitan por las manos se asienten y multipliquen, pasando al líquido. Además, partes como las juntas de silicona y tapas con rosca retienen humedad y residuos donde el moho puede desarrollarse aunque no sea visible. No es que tu termo esté "sucio", sino que está generando un ecosistema no deseado.
Incluso si no ves manchas verdes o negras, podés sospechar de moho si:
Aunque en algunas ocasiones pueden alterar el sabor u olor, la mayoría de los mohos son inofensivos y si tu sistema inmunitario funciona bien, los elimina con facilidad. Con las bacterias ocurre algo similar, aunque es más común que causen molestias gastrointestinales. Las personas inmunodeprimidas o alérgicas deben extremar la higiene.
Estos síntomas pueden presentarse en casos de exposición significativa o repetida:
¡Nadie quiere terminar así por no lavar el termo!
La buena noticia es que prevenir esto es súper fácil. Solo requiere un poco de constancia y los productos adecuados.
La recomendación general es lavar tu botella o termo después de cada uso con agua caliente y detergente. Sí, así como leíste. No es suficiente con enjuagarlo con agua. Si lo usás a diario, una limpieza profunda semanal es ideal.
Aunque los riesgos para la salud suelen ser leves, es mejor prevenir con una limpieza constante, desinfección regular y buen secado. Es importante evitar el uso de termos con olores, manchas o residuos visibles de hongos.
Con estos simples hábitos, vas a poder disfrutar de tus bebidas favoritas sin preocupaciones.