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Salud sexual: mitos y verdades sobre las ITS

Escrito por Swiss Medical | Sep 4, 2025 3:00:00 AM

En el mes que se celebra Día Mundial de la Salud Sexual, es fundamental hablar del tema sin tabúes y desterrar la desinformación. Alrededor de las infecciones de transmisión sexual (ITS) circulan muchos mitos que pueden llevarte a tomar malas decisiones. Contar con información real es el primer paso para cuidar tu bienestar y el de tus parejas. 🤲🏻

¿ITS, ETS o enfermedades venéreas?

Hoy se usa el término infecciones de transmisión sexual (ITS), ya que describe con precisión la presencia de virus, bacterias o parásitos que se transmiten a través de relaciones sexuales vaginales, anales u orales. Muchas de estas infecciones pueden no presentar síntomas, mientras que otras avanzan y generan complicaciones clínicas; en esos casos se habla de enfermedades de transmisión sexual (ETS). Antes también se empleaba “enfermedades venéreas”, un término ya en desuso.

Esta distinción es importante: una persona puede estar infectada sin mostrar signos, pero aun así contagiar a sus parejas.

Derribemos los mitos más comunes:

⛔ Mito 1: Si no tenés sexo con penetración, no podés contagiarte una ITS.

Realidad: Falso. Muchas ITS, como el herpes simple (HSV-1 y HSV-2), la sífilis o el virus del papiloma humano (VPH) pueden transmitirse a través del sexo oral, el contacto entre genitales o incluso de piel con piel en áreas infectadas. El preservativo reduce mucho el riesgo, pero no lo elimina al 100% porque no cubre toda la zona genital.

⛔ Mito 2: No se pueden tener dos ITS a la vez.

Totalmente falso. Es posible, y de hecho común, estar infectado con más de una ITS al mismo tiempo (por ejemplo, VIH y sífilis). Además, tener una ITS puede hacerte más susceptible a contraer otras, al inflamar mucosas o debilitar defensas locales.

⛔ Mito 3: Podés saber si alguien tiene una ETS a simple vista.

¡Para nada! De hecho, la mayoría de las ITS, como la clamidia, la gonorrea, VIH o VPH en etapas iniciales, no presentan síntomas evidentes, por lo que una persona puede ser portadora y no saberlo. Los chequeos médicos y las pruebas de detección son la única forma de saberlo con certeza.

⛔ Mito 4: Una vez que te trataste una ITS, ya no podés volver a contagiarte.

No. Aunque un tratamiento cure una ITS*, no te hace inmune. Si volvés a exponerte, podés volver a infectarte. Por eso, es clave practicar siempre sexo seguro.

*algunas ETS virales como el VIH, el herpes o la hepatitis B no tienen cura definitiva.

⛔ Mito 5: Las ITS solo se transmiten por vía sexual.

Aunque es la vía más común, algunas ITS también pueden transmitirse de otras maneras. Por ejemplo, la hepatitis B (por contacto con sangre infectada, agujas compartidas o de madre a hijo durante el parto); el VIH (sangre, parto, lactancia) o la sífilis (embarazo a feto).

⛔ Mito 6: Usar doble preservativo ofrece una mayor protección contra las ITS.

Al contrario. Usar dos preservativos a la vez genera más fricción y aumenta el riesgo de rotura. La recomendación es usar un solo preservativo de látex (poliuretano o poliisopreno si hay alergia al látex), asegurarse de que esté bien colocado desde el inicio hasta el final de la relación sexual, y revisar la fecha de vencimiento.

⛔ Mito 7: Sentarse en un baño público puede contagiarte una ITS.

No. Los virus y bacterias que causan las ITS necesitan humedad y calor para sobrevivir. No sobreviven fuera del cuerpo en superficies secas o frías, por lo que el riesgo de contagio es prácticamente nulo.

⛔ Mito 8: Si tengo una ITS, siempre voy a tener síntomas evidentes.

No siempre. Muchas ITS, como la clamidia, la gonorrea, el VPH o incluso el VIH en sus primeras etapas, pueden permanecer sin síntomas durante meses o años. Eso no significa que no puedan causar daño: la clamidia, por ejemplo, puede producir infertilidad si no se trata, y el VIH puede avanzar sin dar señales hasta fases más graves. Por eso son tan importantes los chequeos médicos regulares y las pruebas de detección, incluso cuando no hay molestias.

4 recomendaciones clave:

  1. Usá preservativo en todas las prácticas sexuales (vaginal, anal y oral).
  2. Consultar a tu médico sobre realizarse vos y tu pareja las pruebas de ITS antes de tener relaciones sexuales.
  3. Vacunate contra hepatitis B y el VPH, que son altamente prevenibles.
  4. Conversá abiertamente con las parejas sobre la historia sexual de cada uno y la prevención.

Lo más importante: el autocuidado 🛡️

Las ITS pueden afectar a cualquier persona sin importar su orientación sexual o edad. Lo bueno es que la mayoría se cura son tratamientos específicos y que todas son prevenibles con buena información, comunicación abierta y responsable, y autocuidado.